Galerías de arte:
¿Me interesan o paso de ellas?
Hoy nos ocuparemos de las galerías de arte y la importancia de su gestión en un momento en que están desapareciendo muchas de ellas a causa de la crisis y de la transformación que sufre el mercado del arte.
Asimismo, el artista que utiliza las nuevas tecnologías depende menos de los canales tradicionales de comercialización y, cada vez más, promueve su obra al margen del circuito galerístico.
Gracias a internet, como artista, disfrutas en la actualidad de un escaparate inmenso como nunca antes has tenido para la difusión y exposición de tu obra.
Las obras viajan digitalmente de un continente a otro conviviendo entre sí diversas opciones de expresión artística que favorece el intercambio de ideas y proyectos.
Esta nueva proyección global que tienes a tu alcance te permite administrar y promocionar tu trabajo sin intermediarios(“Intermediarios:¿Como actúan en el mercado del arte?”), porque accedes directamente al mercado virtual.
Te conviertes en productor y marchante de tu obra al mismo tiempo, con todas las ventajas y desventajas que ello conlleva.
Puedes administrar directamente la obra que muestras en un mercado online sin fronteras, pero te falta la infraestructura que te ofrece una galería de arte para conseguir reconocimiento, comercialización y proyección de tu trabajo.
Las galerías tienen sus detractores, pero son piezas indispensables para regular el mercado de arte y para que el artista pueda canalizar a través de ellas la difusión de su obra.
Cada día más, dispones de medios y herramientas para gestionar directamente todos los estadios por los que tiene que pasar tu trabajo hasta llegar al público final, pero es la galería la que avala la credibilidad de tu cotización real frente a un mercado complejo y con una amplia y variada oferta.
La galería de arte es el espacio físico que convoca y reúne a los agentes que intervienen en los diversos tramos por los que tiene que pasar la producción artística hasta estar inmersa en la oferta y demanda del coleccionismo.
A la galería acude el crítico de arte que es quien tiene que traducir a nivel estético y conceptual la obra expuesta. Para el coleccionista la figura del galerista es un aval porque recibe información, orientación inversionista y garantía de compra.
Para el coleccionista la figura del galerista es un aval de garantía. Twittea esta frase
Como artista, te conviene la relación con la galería porque significa visibilidad para tu obra y estabilidad dentro del mercado del arte.
Puedes ser autosuficiente en algunos aspectos y saber gestionarte dentro del mundo online, pero, en la actualidad, es aún el mundo galerístico quien te aporta credibilidad frente al coleccionista, infraestructura apropiada para mostrar tu obra, promoción a nivel nacional e internacional, representación en ferias y convocatorias similares, además de respaldo económico y apoyo profesional.
Relaciones entre la galería y el artista
La experiencia de los artistas con las galerías es muy variada y no siempre ha sido satisfactoria (“ ¡Cuidado con las pseudo-galerías!. El artista siempre sale perdiendo”).
Como en cualquier otra relación laboral debe de existir unprincipio de formalidad y cumplimiento de las condiciones que se hayan acordado y por las que se deben regir ambas partes. Si se respetan estas obligaciones, te conviene como artista tener una o más galerías con las que puedas trabajar.
Las galerías que trabajan dentro del mercado primario de arte son los agentes intermediarios que tiene una relación más estrecha con los artistas que representan o de los que exponen su obra. El porcentaje que la galería se reserva sobre la venta está alrededor del 50%.
Con esta comisión (que normalmente parece excesiva para el autor) la galería debe cubrir los gastos de exposición y representación.
El reparto del beneficio no es equitativo desde el punto de vista del artista, porque éste le puede ocupar hasta dos años de trabajo para poder celebrar una exposición y se lleva el mismo porcentaje que la galería que inaugura varias exposiciones durante el curso, en intervalos de uno o dos meses.
Las galerías de arte como negocio
La galería de arte cumple una función cultural, pero debe gestionarse como un negocio.
El galerista tiene que saber conjugar con acierto ambos conceptos (cultura y negocio) para hacer viable la empresa.
Una gran mayoría de los profesionales inician su actividad desde una perspectiva más artística que comercial y ello conlleva que muchas iniciativas se malogren en los primeros años de actividad.
La relación con el artista, como sustento de la galería, es primordial y marcará su sello expositivo, porque para el galerista su pasión por el arte y el trato directo con el trabajo de los creadores es uno de los motivos que profesionalmente inspira su vocación.
Las exposiciones son de acceso gratuito y libre, aportando con ello una relevante actividad cultural de la que se beneficia toda la sociedad.
En lo que se refiere al mercado del arte, la personalidad del galerista y su profesionalidad es un aval de garantía de la obra expuesta y de los artistas que representa.
Al frente de galerías punteras suele estar un profesional con capacidad emprendedora, con intuición para apostar por nuevos valores y un excelente relaciones públicas.
Cualidades necesarias para que confíen en su labor tanto los artistas que representa, como los coleccionistas que integran su cartera de clientes.
Ser galerista es una vocación más que una profesión, porque solo con entusiasmo y capacidad de riesgo se puede asumir. No existe una formación específica regulada, aunque en los últimos años estén proliferando los cursos y masters especializados.
Tipos de galerías
Existen muchos tipos de galerías y es difícil hacer una clasificación general en la que se puedan agrupar por su actividad o ubicación.
Según su modelo de negocio pueden ser:
– Por representar exclusivamente artistas contemporáne
os (mercado primario).
– Por trabajar con firmas muy reconocidas y con obra de reventa (mercado secundario)
– Por alternar ambos mercados (primario y secundario).
– Por trabajar con artistas emergentes.
También se pueden clasificar por el ámbito en que desempeñan su trabajo:
-Galerías locales: Realizan una labor de promoción de artistas emergentes o de historial medio. Fomentan el coleccionismo más cercano. Es importante su mediación por ser el primer eslabón donde confluye el artista emergente y el coleccionista en sus inicios.
-Galerías nacionales: Son salas de primera línea en el país y con una proyección internacional. Trabajan con artistas consolidados, con coleccionistas importantes y colaboran estrechamente con museos, fundaciones e instituciones similares.
-Galerías internacionales: Son galerías de gran prestigio y consolidadas mundialmente. Con una cartera de coleccionistas de élite y con acceso a los principales museos. Su prestigio suele estar por delante de los artistas que representan. Su trabajo se desarrolla tanto en el mercado de artistas vivos como con obras de primer nivel del mercado secundario. Su nivel de negocio es importante, especulativo con los artistas y agresivo con los coleccionistas.
– Galerías comerciales: Galerías de nueva creación cuyo activo son los artistas emergentes y con una clientela joven.
– Galerías de alquiler: Que comercializan una obra decorativa y de factura más artesanal que artística. Suelen cobrar un alquiler por exponer y no ejercen ninguna labor de representación o promoción del artista.
– Galerías itinerantes: Son las que no disponen de un local propio y organizan exposiciones en localizaciones puntuales, como pueden ser centros culturales, fundaciones, establecimientos hoteleros, etcétera. Cada galería trabaja en un segmento del mercado determinado y en el que se especializan en función de su clientela.
Al frente de galerías punteras suele estar un profesional con capacidad de riesgo y un excelente relaciones públicas. Twittea esta frase
La programación de sus exposiciones está ajustada a las preferencias personales del galerista o por la demanda que existe en el sector de mercado en que se desarrolla su trabajo.
El número de exposiciones que se inauguran durante el año suelen oscilar, normalmente, entre cuatro y diez.
No obstante, las galerías de carácter comercial suelen mantener abiertas las exposiciones tan solo quince días, con intervalos tan solo de tres o cuatro días entre la clausura y la inauguración de la próxima exposición.
Se entiende que a menor número de inauguraciones también se reducen los gastos de la galería y se amplía el tiempo en que se muestra la obra de un artista.
Otras, por el contrario, entienden que mayor número de exposiciones durante el año es también mayor el beneficio que pueden obtener, bien sea porque alquilan la sala o porque dan visibilidad a más artistas.
La política que sigue cada galería determina el cupo de muestras que convoca anualmente, bien sea porque las exposiciones son su único sustento o porque debe combinar la programación con la asistencia a ferias o alternarla con otras actividades paralelas.
La finalidad es combinar arte y negocio de forma satisfactoria que permita la viabilidad de la galería para alcanzar sus objetivos de programación. Cada una recurre a diferentes métodos para conseguirlo y diferenciarse de la competencia.
Es una labor ardua que requiere plena dedicación para conseguir resultados positivos para el propio negocio y para los artistas que representa. Por último, aconsejarte que siempre dejes por escrito la relación que acuerdes con una galería.
Redacta y firma un contrato en el que queden bien concretadas las condiciones en las que os obligáis ambas partes.
Especifica en el compromiso en qué términos entregas tu obra para depósito y venta: datos personales, fotografía, medidas, técnica, tipo de obra, precio de venta, porcentajes, descuentos, forma de pago, condiciones de devolución, transporte, plazos, etcétera.
Defiende siempre tus derechos morales y propiedad intelectual como autor, porque son irrenunciables y la galería debe respetar (ver también artículo “La importancia de potenciar tu marca personal”).
Por eso, aunque como artista te valgas de canales alternativos o de las nuevas tecnologías para potenciar la difusión de tu trabajo artístico, te conviene mantener una buena relación con las galerías, en la medida que te puedan ser útiles para introducirte o mantenerte en el mercado del arte.
Debes ser consciente de lo que realmente te aporta cada opción del mercado y nunca sustituir una por otra o desechar una posibilidad de trabajo, simplemente, porque estás inmerso en otra historia.
La galería necesita al artista porque sin él no tiene posibilidad de negocio.
Como artista necesitas a la galería para conseguir credibilidad y mercado.
Una buena relación profesional siempre beneficia a ambas partes.
¿Qué te parece?.
Nos vemos en los comentarios-
Hola mi nombre es Lucas, me pareció muy interesante toda la información y por cierto estaba buscando sobre como poder llegar a concretar una cita con una galería lo cual nunca me animé por diversas razones. Creo que es necesario para dar respaldo a nuestra carrera artística encontrar una galería que nos represente pero antes hay que conocer cual es la indicada. Muchas gracias!!
Hola Lucas.
Asi es. Conviene seleccionar las galerías en función de la obra que realizas y la relación que te conviene mantener a nivel expositivo y de gestión de tu obra. No hay que precipitarse, ni admitir condicionarse a la primera oferta. Reúne información de cada galería y selecciona según tus intereses.Siempre será más apropiada la decisión que tomes, que si contactas sin ningún criterio. Un abrazo.
Muchas gracias por los valiosos artículos que recibo cada domingo en mi bandeja de entrada. Creo que conocer como funcionan las galerías y el rol que cumplen dentro del mercado del arte es muy importante para construir una carrera artística sólida.
Me queda pendiente una consulta: ¿cuándo es conveniente aceptar la exclusividad con una galería? ¿depende del mercado o el volumen de ventas o producción del artista?
Desde ya, muchas gracias por la respuesta.
Hola Adriana.
Aceptar trabajar en exclusiva con una galería dependerá de las circunstancias de cada momento y la disponibilidad de cada una de las partes. Un contrato de exclusividad se debe valorar por parte del artista desde el punto de vista de las condiciones que el galerista le imponga y que margen se le permite en disponer de su propia obra. Encontrar una galería que quiera trabajar en exclusiva contigo es relevante y, en principio, aporta estabilidad a tu carrera artistica. No obstante, debes valorar los pros y contras de limitar la proyección de tu arte a un solo canal de venta y promoción.Por supuesto, esta exclusividad se puede negociar entre el artista y la galería a la hora de firmar el contrato y especificar en detalle a lo que se obliga cada uno. La gestión que realiza una galería es primordial para la proyección y venta de la obra y poder relegar toda esta tarea permite al artista dedicarse por completo a crear.Por supuesto, el artista debe responder con una producción que pueda atender los plazos y la demanda de la galería. Es importante especificar si la concesión que se le hace a la galería es a nivel local, nacional o internacional. También si es para toda la producción o por una parte de la misma.
Muy buen artículo.
Quizá podrían orientarnos en cómo escribir -a nivel de redacción- a las Galerías, cómo atraer su atención, en fin cómo tratar de introducirnos.
Gracias, saludos,
Tania
Hola Tania.
Tengo en cuenta tu sugerencia y, seguro, que publicamos un post sobre el tema que propones.
Un abrazo.
Hola ,soy pintora autodidacta , quisiera saber qué tengo que hacer para vender mis cuadros
Hola Alicia.
No se trata de una acción en concreto, sino de varias actuaciones encaminadas a facilitar la comercialización de tu obra.
Depende de muchos factores saber que estrategia puede ser la más adecuada a tu obra y al entorno artístico en que te desenvuelves.
En los artículos y cursos de Objetivo Arte te facilitamos información, recursos y sugerencias que pueden ser de tu interés y que puedes aplicar en tu trayectoria artística.
Saludos.